Este es un libro exuberante y prodigioso. Puede leerse como una inmersión en la fascinante vida de los leñadores, un inverosímil relato de aventuras, un tratado de filosofía salvaje, una alucinante enciclopedia, un manual de supervivencia, un diario de viaje, una lección de ecología, una indagación sobre la naturaleza de la escritura, un experimento sobre los límites del conocimiento... Pero en última instancia, es la historia de una hombre y de una búsqueda: un verdadero experimento existencial con el que descifrar lo que significa estar vivo. Tal vez los bosques tengan la respuesta, tal vez un oso, un alce o un lobo, alguna bestia sabia y antigua, indiferente a las angustiosas preguntas de los hombres y capaz de evidenciar la futilidad de tanto interrogante.